La creatividad es algo difícil de definir que a muchos de nosotros se nos escapa precisamente cuando más la necesitamos. ¿Entonces de donde viene? Los grandes y los buenos han tratado de responder a esta misma pregunta, como lo demuestran las citas siguientes:
«La creatividad surge de un conflicto de ideas».
Donatella Versace (diseñadora de moda)
«Pero de las limitaciones surge la creatividad».
DebbieAllen (bailarina y coreógrafa)
«La ansiedad es la doncella de la creatividad».
TS Eliot (escritor)
Parece que el conflicto, las limitaciones y la ansiedad podrían ser puntos de partida. Pero esto no suena muy agradable. Entonces, si deseas acceder a tu genio creativo interior sin la confusión que prescriben Versace, Allen y Eliot, sigue leyendo para conocer cinco ideas que podrían funcionar…
1) Estimular a crear
Ya sea que se comprometa a aprender un hecho o una palabra nueva cada día o que desarrolle un pasatiempo completamente nuevo, cambiar las cosas es una excelente manera de estimular la creatividad. Aproveche al máximo el tiempo de inactividad leyendo una revista o un libro que normalmente no leería y aproveche los atascos con estimulantes programas de radio, audiolibros o podcasts. Antes de que te des cuenta, serás una fuente de conocimiento, rebosante de nuevas perspectivas e ideas.
Es importante que aproveche los momentos que son su “tiempo libre” y utilice este tiempo para realizar actividades que normalmente tampoco tendría la oportunidad. Para seguir siendo creativo debes dedicar una hora a la semana a participar en un nuevo deporte, actividad o cualquier cosa que te inspire y motive.
2) Toma nota
Lo molesto de la creatividad es que tiende a aparecer en los momentos más inoportunos. Asegúrate siempre de llevar contigo papel y lápiz (o la aplicación equivalente para tu teléfono inteligente), ya que las mejores ideas no suelen surgir en tu cabeza cuando estás encadenado a tu escritorio. Si adquiere el hábito de anotar sus ideas, aparecerán otras nuevas con más frecuencia. Y no lo olvides, tus notas no tienen que tomar forma escrita, pueden ser diagramas de araña o incluso garabatos, dependiendo de cómo te apetezca.
3) ¡Fuera!
Se puede lograr una nueva perspectiva mentalmente, aprendiendo sobre cosas nuevas, pero también, literalmente, saliendo de casa. Camine a algún lugar donde normalmente conduciría (suponiendo que no esté demasiado lejos) o cambie el sofá y el televisor para dar un paseo por su área local. El aire fresco seguramente hará maravillas. Entonces, para los verdaderamente aventureros, ¿por qué no coger un autobús sin saber adónde va? Esta puede ser una manera fácil y económica de sumergirse en un lugar nuevo y estimulante, además, cuando termines de explorar, ¡siempre podrás volver a tomar el mismo autobús a casa!
4) Ejercicio y H2O
La creatividad se basa en un buen estado físico, así como mental. Como tal, necesitarás hacer ejercicio regularmente para que fluya esa creatividad. Un rápido trote o un paseo en bicicleta le brindarán aire fresco y una ráfaga de endorfinas invaluables. Del mismo modo, asegúrese de que su cerebro esté bien regado para evitar la lentitud mental; La deshidratación puede ser un verdadero asesino de la creatividad.
5) Imagina que tienes 10 años
Libros como ‘Winnie the Pooh’, ‘El Gruffalo’ y ‘El Principito’ ofrecen generosas dosis de creatividad. Sólo porque seas un adulto no significa que debas olvidarte de tu niño interior. ¿Recuerdas que cuando eras pequeño tenías amigos imaginarios, luchabas contra dragones imaginarios y asumías que la joroba de un camello estaba llena de agua? ¡Aproveche ese sentimiento y de repente se encontrará adoptando un nuevo enfoque para las tareas creativas y la vida misma!
Para concluir, una cita del músico George Shearing:
“¿Se le puede dar a alguien un alto grado de creatividad? No.
Se les puede dar el equipo para desarrollarlo, si lo tienen en primer lugar”.
¡Esperamos que este artículo le haya dado algunas ideas para desarrollar ese equipo!
Esta es una publicación invitada aportada por Julie Peña. Julie trabaja en marketing en Impresoras.com, cree que “la creatividad juega un papel importante a la hora de motivar y refrescar a las personas en el lugar de trabajo”. Cuando Julie no está en la oficina, le gusta leer sobre productividad y las bellas artes de Londres.