¿¿¡¡Qué!!?? ¿Cómo ser un líder social más cercano? ¿A quién le importa? ¿Qué diablos tiene que ver ser cálido y confuso con ser un gran líder? Y otra cosa… si no fuera por toda esta maldita gente con la que tenemos que trabajar, podríamos lograr algo de trabajo.
Bueno, resulta que sí importa. Si bien no es un obstáculo ni un descarrilamiento, si se ignora por completo, podría tener consecuencias negativas que afecten su eficacia como líder.
Sé esto por experiencia personal. Sí, tengo una confesión que hacer. Soy un introvertido apasionado. Soy ese tipo en la función social que cuenta los minutos, buscando una puerta lateral para salir silenciosamente sin ser visto. Soy reservado por naturaleza, no muestro muchas emociones, pienso antes de hablar y odio tener conversaciones triviales con personas que no conozco muy bien.
Solo salgo del armario así como un ejemplo de alguien que ha aprendido a adaptar su comportamiento para satisfacer las necesidades de mi carrera, mi familia y ser un mejor líder y persona. Es una necesidad de desarrollo para mí y algo en lo que estoy trabajando para mejorar.
También es difícil para un extrovertido dar consejos a un introvertido sobre cómo ser más accesible y sociable. Es algo muy natural, y lo que les funciona a ellos no siempre funciona para alguien que es todo lo contrario.
En este caso, estoy muy cualificado para dar consejos sobre algo que se me da mal.
Entonces, ¿cuáles son las posibles implicaciones conductuales o de liderazgo para alguien que es introvertido por naturaleza y/o algo reservado? Si no tienes cuidado, podrías:
– Ser visto como alguien que no escucha las preocupaciones de los demás.
– Tener problemas para trabajar como parte de un equipo.
– No desarrollar las redes sociales necesarias para gestionar tu carrera.
– Ser visto como distante o incluso arrogante.
– Ser visto como poco entusiasmado con las personas o los proyectos.
– Tener problemas frente a grupos, haciendo presentaciones.
– Ser visto como difícil de leer y difícil de confiar.
Vaya, ¿lo habría sabido?
Para evitar estos posibles problemas, aquí hay 7 consejos para todos aquellos ingenieros, científicos, contables, programadores y gerentes que quieran mejorar su sociabilidad:
1. Sonríe.
Para mí, este fue un comportamiento aprendido. No me di cuenta del efecto negativo que estaba teniendo en la gente hasta que alguien me lo señaló. Una vez que comencé a hacerlo (y me dolía), obtuve resultados sorprendentes. No, no es necesario que tengas una sonrisa tonta todo el tiempo; solo hazlo cuando saludes a alguien o te cruces con él en el pasillo.
Nota cultural interesante: En Roma, los italianos no sonreír a los extraños. Me tomó un par de días darme cuenta de esto, debieron pensar que estaba loco.
2. Divulgación personal.
Comparte más sobre ti. No me refiero a compartir sus pensamientos sobre su última teoría sobre liderazgo; me refiero a información personal. Hacerlo ayuda a generar confianza y relaciones: es un ritual de unión. Precaución: no te excedas al principio, ya que asustarás a la gente. Comience compartiendo algunas fotos de sus vacaciones, o una historia sobre sus hijos, o su perro, etc. Continúe hasta llegar a eso y la gente comenzará a compartir información a cambio.
3. Aumente sus interacciones diarias, semanales y mensuales.
Asegúrese de hablar (no enviar correos electrónicos) con al menos 3 personas cada día y 15 por semana. La próxima vez que tengas la tentación de enviar ese correo electrónico a la persona que trabaja a la vuelta de la esquina, levántate y habla con ella. O levante el teléfono y llame. Mantén tu puerta abierta.
Tome un café o almuerce con al menos una persona al mes solo para establecer contactos, dentro o fuera del trabajo. Recuerda sonreír al menos una vez. (-: ay.
4. Celebre reuniones individuales y de equipo con regularidad.
En sus reuniones individuales, reserve un poco de tiempo para una conversación informal. Ayuda a romper el hielo y establecer una buena relación. Además de estas interacciones regulares y planificadas, programe horas de almuerzo informales y una reunión ocasional fuera del sitio. Si puede, organice una reunión en su casa.
5. Mejore sus habilidades de presentación.
Las habilidades de presentación son una habilidad que se aprende: todos podemos mejorar con instrucción y trabajo duro. He escrito sobre esto antes – Las habilidades de presentación son IMPRESCINDIBLES para cualquier líder.
6. Mejora tus habilidades para escuchar.
Los líderes reservados pueden parecer desinteresados o que no escuchan, porque no muestran mucha emoción ni brindan muchas señales visuales. Practique asentir con la cabeza, hacer contacto visual, sentarse derecho, hacer preguntas y comprobar si ha comprendido. Comprobar la comprensión es especialmente importante para alguien que no siempre “lee entre líneas” muy bien o no capta emociones o sentimientos. Después de una reunión, consulte con otras personas para ver si entendieron lo mismo que usted.
7. Lea un libro sobre cómo mejorar sus habilidades sociales en el lugar de trabajo.
Mejorar su accesibilidad y sociabilidad llevará tiempo. Esta publicación de blog solo está destinada a que alguien comience. Existe mucha ayuda integral, escrita por expertos que tienen más experiencia y sabiduría que yo. Ejemplos incluyen:
– Inteligencia social: la nueva ciencia de las relaciones humanas
– Cómo hablar con cualquiera: 92 pequeños trucos para un gran éxito en las relaciones
– Carisma ejecutivo: seis pasos para dominar el arte del liderazgo
Cuando se trata de personalidades, todos tenemos nuestras preferencias naturales. No existe un molde estándar al que debamos convertirnos para convertirnos en líderes eficaces. “Tipo fuerte y silencioso.“Los líderes pueden ser tan efectivos como los líderes carismáticos.
Sin embargo, es importante no utilizar “así soy yo” como excusa para no abordar comportamientos que limitan su potencial de liderazgo.